Por Eduardo Nabal
Precedido de la palabra polémico, el último ensayo del joven activista trans Miquel Missé es toda una declaración de principios e interrogantes contra la medicalización de los cuerpos más jóvenes en un continuo desafío a los binarismos de género y a la “expresión de género” misma como una nueva forma de manifestarse mas allá de barreras reales o ficticias.
Missé -que se apoya en diferentes testimonios- encontró pronto apoyo en el GTMB, allí donde ya militaban las mujeres trans que estaban más expuestas al estigma que los chicos trans (quienes no entraron en el activismo hasta la década de los noventa con el relativo privilegio de no tener que estar combatiendo el estigma del trabajo sexual, por un lado y, por otro, la violencia constante en el espacio público. Pero en el 2006 empezaron debates que protagonizaron algunas asociaciones de personas trans impulsando una propuesta de ley, cuyo fracaso llevo a la Guerrilla Travolaka.
Missé critica también la estandarización de lo trans, la banalización en los medios de comunicación, las cicatrices invisibles y las expuestas a través de estereotipos que, no obstante, han ido cambiando como los tipos de mujer o de hombre. Un gran impulso lo encontraron al unirse con grupos extranjeros, lo que les condujo a una gran marcha contra la patologización en octubre de 2007.
Escrito con rigor y fluidez, A la conquista del cuerpo equivocado es un ensayo valiente y muy personal en el que la cuestión del género se critica desde su nacimiento, pero también se cuestiona la medicalización y hormonación de les bebés trans como dispositivo de la medicina que siempre acaba ejerciendo su efecto catalogador. Este y otros aspectos sobre lo trans masculino desde una mirada joven y renovadora son algunos de los ejes de A la conquista de el cuerpo equivocado.
Cuerpos Periféricos en Red 
Deja una respuesta